Entradas

Mostrando entradas de marzo, 2016

Flores a la memoria.

Imagen
Hay pocas cosas más ciertas como que nunca era yo. No eran mis ojos los misteriosos, ni mis letras las despistadas que buscaban hacerte reír. No eran míos los anónimos, ni aquellos últimos pensamientos, ni los pasos al otro lado de la puerta. No fue a ti, a quien llamé flor de litio a sabiendas de su inexistencia.  No fue tu día nunca mío. Tampoco fue tuyo aquel primer abrazo que se quedó en aire y esperanza entredicha. No fue, nunca fui. Las ruines disculpas y blasfemias al tiempo no fueron menos verdad como que no llenan corazones. Tampoco es ahora menos soez pronunciarse. Y es, sin embargo, cómico verte en estas letras ahora que ya no estás por aquí.  Me sorprende mi vaga memoria, indispuesta, que supo desde aquel primer momento que todo aquel desinterés vivía a mi costa y omisa a este dulce sabor a recuerdos que respiro. Y ahora que ya no recuerdas que yo nunca lo hice y que dolió, ha venido todo de repente a desquitarse. Nunca será por mucho tiempo, pero sí como