¿Casualidad?

Agonizante y torturador este pensamiento que se agita en mi cabeza, que me roba el sueño, que me hace dudar de mí.

No sé que pensar, si de verdad lo fue, si justo en ese momento tú tenías que estar allí. Si yo tenía que estar allí. Si el destino había decidido jugar con el tiempo y situarme en la escalera, en el preciso momento en que tú aparecerías.Y tampoco sé si fue casualidad, que yo escondida tras tres enormes siluetas viera en lo alto tus ojos. Y menos si hubo casualidad cuando buscaste mi mirada para cercionarte y  se abrió un claro de luz entre nosotros.

 Y te ví durante unos segundos, sólo unos pocos, no sé si de casualidad o de qué.